La comunicación es un sistema. Funciona de manera integral, como una cadena en la que cada eslabón contribuye de manera substancial al equilibrio y al sentido final. Pero hay más, hay un plus que se genera de la particular combinación de esos eslabones “El todo es más que la suma de las partes”, señala una conocida frase . El cuerpo humano no es una sumatoria de órganos; hay una energía adicional que constituye una “suma positiva”, y es lo que finalmente produce vida. Un motor tampoco es un conjunto de componentes mecánicos sino una determinada articulación de los mismos, que en conjunto produce explosión. Eso es sistema. Y cuando un sistema se produce entre humanidades, entre relaciones sociales, lo que existe es precisamente Comunicación. Ni palabras, ni gestos, ni imágenes, ni sonidos, por sí solos, colman su significado. Es todo ello y mucho más.
Los invito a ver este video y a sumar sus comentarios, pensando en cómo podemos vislumbrar esto en nuestras interacciones cotidianas, en las instituciones y en la sociedad.
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Gracias Josefina, estoy de acuerdo con lo que planteás, creo que en definitiva estás apelando a que un sistema integral implica también -como condición- la ruptura de desequilibrios desde lo social y lo educativo. Condición de posibilidad para una comunicación en el sentido de encuentro de subjetividades.
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